El pase bursátil es un único contrato que contempla dos operaciones simultáneas. El inversor vende (o compra) valores negociables a un precio de contado o a plazo y pacta simultáneamente la operación inversa de compra (o venta) para un mismo comitente y en un vencimiento posterior.
En este tipo de operatoria quien vende los títulos en contado deja de ser su propietario, por lo que al momento de fijar el precio futuro debe tener en cuenta si los títulos pagarán dividendos u otros conceptos, ya que durante la vigencia del contrato el vendedor no goza de los derechos patrimoniales.
Ventajas
La caución bursátil es una operación similar al pase, pero a diferencia de éste, al precio de venta de contado de los valores objeto de la caución se le aplica un aforo (garantía) determinado por el Mercado de Valores.
Este aforo es un porcentaje que fija el límite de fondos que puede obtener el tomador a cambio de los títulos que entregó.
De manera que un inversor que cuenta con fondos líquidos puede prestarlos a cambio de valores y al vencimiento del plazo convenido obtener el dinero prestado más un rendimiento cierto (dado que interés se calcula al comienzo del contrato).
La caución no implica cambio de propiedad de los títulos sino su inmovilización por un tiempo determinado. Si durante la vigencia de la caución el título realiza pagos de dividendos u otros conceptos, el dueño original será quien goce de estos beneficios.
Ventajas